22 sept 2007

Entrevista a un hombre encarcelado por ser socialista año 1936, lo mismo han hechos los socialistas en los 90 con los Guardias Civiles democráticos.

Entrevista a un hombre encarcelado por ser socialista y demócrata año 1936, lo mismo que han hecho sus correligionarios socialistas con los Guardias Civiles demócratas en el año 1990.

Reproducimos casos idénticos en períodos de la historia diferentes en nuestra querida España, a Herminio Barreiro lo persiguieron y encarcelaron por el ejercicio de un derecho legítimo humano y democrático, ser de izquierdas y socialista, lo hicieron los franquistas; a través de la historia se repiten los mismos hechos con actores diferentes, años 90, Gobierno Socialista encarcela a Cientos de Guardias Civiles democráticos por el simple hecho de solicitar el derecho de asociación cultural y deportiva, en ejercicio de un derecho constitucional prescrito en la parte dogmática de nuestra constitución Artº 22 CE, la represión socialista de los años 90 y la Franquista del 36 , con diferentes regidores persiguieron los mismos fines “Evitar los legitimos IUS NATURALES del Hombre y sólo por mantener ideas y beneficios personales que para nada beneficiaban a la sociedad”, sólo una diferencia importante, los franquistas no han sido juzgados y siguen en la democracia –el que quiera que entienda, un gran teatro de democracia sin demócratas- y los socialistas tienen en su haber un gran logro el de ser el primer gobierno español que ha sido recientemente condenado por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo por vulnerar derechos humanos a los ciudadanos Guardias Civiles – Sentencia de Noviembre del año 2006 y sin haber llevado a cabo reparación alguna a pesar de las sentencias nacionales e internacionales- en fin los mismos perros pero con distintos collares , que lo único que persiguen es su bienestar personal.

Me encarcelaron el 9 de marzo de 1939 y no me repusieron en mi plaza de maestro hasta 1974»
entrevista herminio barreiro Maestro represaliado

Herminio Barreiro podría contra la historia de la España del siglo XXI en primera persona. La historia de los perdedores, la del bando republicano que le condujo a la cárcel tras la Guerra Civil y le mantuvo alejado de su profesión durante más de 30 años de vida. Hoy, sus amigos y vecinos de Sisán, Ribadumia le brindarán un homenaje a una trayectoria impecable de lucha por la libertad.
-Cien años dan para mucho, ¿qué pesan más los buenos o los malos recuerdos?
-Ha sido una vida plena, me siento satisfecho de no haberme creado nunca enemigos. Cuando me ven, no sólo me dan la mano, me dan abrazos.
-¿A qué se dedicaba antes de la guerra?
-Yo era profesor. Mi carrera empezó en Bordel, cerca de Carral, en A Coruña, pero dejé a una novia que tenía y ante esa circunstancia me fui a un colegio de Pontevedra.
-¿En qué año ocurrió todo este cambio?
-En el año 1934 me trasladé a Pontevedra y al año siguiente me casé y todavía sigo con mi mujer. Setenta y dos años de matrimonio y tres hijos.
-La guerra llegó casi de recién casados, ¿cómo recuerda ese 18 de julio del 36?
-No se me olvidará nunca. El día anterior salimos de vacaciones y fuimos a Raxó, pero ya se notaba en el ambiente que algo pasaba. Oíamos en la radio que en Marruecos había varias revueltas y ya nos esperábamos lo peor.
-¿Y cómo sucedió todo?
-Recuerdo que el cartero me dijo que no le gustaba nada lo que estaba pasando. Apareció mi hermano muy intranquilo y me advirtió que tenía que desaparecer porque ya se oían disparos en Marín.
-¿Estaba afiliado a algún partido?
-Era socialista y estaba afiliado al partido. Me tuve que recluir en la casa de un familiar hasta que pude volver a Sisán cruzando el monte por la noche.
-¿Qué ocurrió al acabar la Guerra Civil?
-Ocurrió lo peor. Me encarcelaron el 9 de marzo del 1939 y en abril me mandaron para la prisión de Vigo hasta 1943. Cuando salí, lo hice con una mano delante y otras detrás. No tenía nada.
-¿Tuvo que trabajar de todo para sobrevivir?
-Había que alimentar a tres hijos y no podía dar clase, así que un jefe de Conservas Peña me ofreció trabajo en una oficina.
-¿Nunca más volvió a ejercer de maestro?
-Hasta 1974 no me repusieron. Me mandaron a Sanxenxo a dar en primero, el curso que no quería nadie.
-Y además, ya tenía 67 años...
-Sí, pero estaba satisfecho de poder dar clase otra vez.
-Su vida ha sido una verdadera cruzada, ¿qué espera de este homenaje?
-He tenido una vida plena y se que mis vecinos y amigos me quieren. Este tarde, a las 19 horas espero estar rodeado de familiares y amigos. Ojalá puedan venir mis compañeros de Bordel. Sólo estuve allí cuatro años, pero todavía nos llamamos.
-Los que no faltarán serán sus hijos...
-Vendrán mis tres hijos y mis nietos. Después de tanta lucha, están todos licenciados y casi todos colocados. Un orgullo.
-¿Su único delito fue ser socialista?
-Siempre fui una persona muy tranquila que no me metía en problemas, pero era socialista.
Entrevista publicada en Voz de Galicia.